Nutrolen: una alternativa
para la nutrición nitrogenada

Las fuentes solubles de nitrógeno si aplicadas en cuantidades pequeñas, deben ser repetidas frecuentemente para satisfacer las necesidades de los cultivos, con posibles aumentos del costo de mano de obra y del tiempo de aplicación. Si proporcionada en altas dosis, pueden perderse por volatilización de amonio y lixiviación de nitratos y provocar excesos vegetativos.

Las fuentes de nitrógeno de liberación lenta / controlada (fertilizantes recubiertos, de baja solubilidad o mineralización lenta y con inhibidores de la nitrificación) para aplicación radicular dependen de temperatura, humedad, pH y actividad microbiana del suelo y también pueden sufrir perdidas (menores).

Nutrolen es una fuente de nitrógeno de liberación lenta para aplicaciones foliares, por lo tanto, se evitan perdidas, se reducen los volúmenes aplicados y es muy efectiva cuando las plantas no consiguen absorber nitrógeno por las raíces. Es un fertilizante mineral líquido a base de urea y urea formaldehido, con micronutrientes sinérgicos (B y Zn).
Después de la pulverización es absorbido rápidamente y es estoqueado en las vacuolas, liberando nitrógeno en las células a lo largo de muchas semanas.

Nutrolen se puede proporcionar con bajos volúmenes de agua, incluso con pulverización electrostática y es compatible con la mayoría de los fitosanitarios. No es corrosivo con los equipamientos y debido al muy bajo contenido de biuret no provoca fitotoxicidad, ni siquiera en alta dosis. Además, por su viscosidad mejora la adhesión del caldo.

Proporciona nitrógeno por un largo plazo sin causar excesos vegetativos, evitando de esta forma la pérdida de calidad y la reducción de la vida postcosecha de los frutos. Incrementa el contenido proteico en cereales y leguminosas. Aumenta las reservas de nitrógeno para la temporada sucesiva en frutales caducifolias, cuando aplicado a final de verano.

Nutrolen es ideal:

  • si no es posible entrar frecuentemente en campo, por ejemplo, por la altura cultivo en extensivos
  • en caso de absorción radicular limitada, por ejemplo, en caso de suelos salinos, falta o exceso de agua, problemas fitosanitarios
  • cuando la planta no transpira, por ejemplo, en caso de elevada humedad del aire, sobre todo en invernadero
  • en caso de cultivos cansados (ej. tomate de ciclo largo) o con mucha producción para suportar las necesidades de nitrógeno favoreciendo la producción y no el desarrollo vegetativo